El rey de los electrodomésticos se encuentra en una época dorada. Aquí intentamos explicar las diferencias y similitudes de cada tipo de tecnología.
La «caja tonta» es cada vez más inteligente. Internet ha venido para cambiarlo todo. Los televisores viven actualmente en un contexto de cambio, en parte gracias a nuevos materiales y resoluciones superiores (lo más avanzado es la Ultra Alta Definición o 4K). Pero el mercado es amplio y cada fabricante trabaja con su propia tecnología, lo que obliga al consumidor a tener presente las novedades de las últimas tecnologías.
El rey de los electrodomésticos se encuentra en una época dorada. Con sus diferencias y similitudes, cuando vemos aquello de LED, OLED, LCD nos preguntamos, muchas veces, qué será y si es mejor o peor un modelo que otro. Cada tecnología tiene sus propios beneficios. Y sus fallos, claro.
Plasma
La tecnología de este tipo de televisores, normalmente de gran formato, consiste en dos cristales que albergan una serie de celdas diminutas colocadas entre dos paneles de cristal que, a su vez, contienen una mezcla de gases noble. Al estimularlo por electricidad se convierte en el denominado «plasma». Esto es una sustancia fluorescente con capacidad de emitir luz y que, en su momento, supuso una gran revolución.A su favor se encuentra la gran calidad de imagen, tanto en oscuridad como en brillos y está pensado, sobre todo, para la proyección de contenidos cinematográficos. Ahí es donde se hace fuerte y demuestra su potencial. Así, el nivel de negro y el contraste es superior al resto.
También la rapidez en la emisión de las imágenes es más rápida que los demás, lo que lo convierte en una tecnología sensacional pero, dado su precio y su escasa penetración en el mercado en la actualdad lo han convertido en un modelo de televisión poco práctico.
LCD
Aquí, estamos ante un gran avance respecto a los televisores de tubos de rayos catódicos, que han pasado a la historia a pesar de que durante décadas era prácticamente la tecnología existente. Los televisores LCD (Pantalla de Cristal Líquido) son aparatos delgados en comparación con aquellos monstruos de tubos de rayos catódicos que se encontraban en los salones hace unos años. Está formado por píxeles en color o monocromos colocados sobre una fuente de luz, que permitirá iluminar y reproducir los diferentes colores de la imagen en el momento de la proyección.Aquí, cada píxel individual se divide en tres células (llamadas subpíxeles) de tres colores (rojo, verde y azul), respectivamente, por el aumento de los filtros. Cada subpíxel, a su vez, se puede controlar de forma independiente con el fin de lograr miles o millones de posibles colores para cada píxel. A su favor es su gran extensión en el mercado, pero sin embargo, en formatos grandes puede provocar pérdida de calidad de la imagen. El contraste y el brillo queda afectado por el reflejo de los rayos del sol, siendo esta otra de las desventajas.
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